Troskito se ha quedado sin compañero al que morderle la cola, al que quitarle el sitio más calentito, y al que apartar del comedero para quitarle lo más sabroso. A Zipi no le importaba, el se iba sin más. Y así se ha ido, poco a poco, sin darse importancia. Se ha dormido y ya descansa. Un beso muy grande Zipi.
2 comentarios:
Lo siento mucho, neno, :-( Un besito entre las orejas para el Troski
bueno... a recordar ahora tantos momentos de alegría.
Era muy viejecito así que seguro que ha vivido mucho y ahora durmiendo podrá soñar mucho más
Publicar un comentario